Joacaz gobierna en Judá
31Joacaz
tenía veintitrés años cuando subió al trono y reinó en
Jerusalén tres meses. Su madre se llamaba Hamutal y era hija
de Jeremías, de Libna. 32Joacaz
hizo lo malo a los ojos del Señor,
igual que sus antepasados.
33El
faraón Necao metió a Joacaz en la cárcel de Ribla, en la
tierra de Hamat, para impedir que gobernara en
Jerusalén. También exigió que Judá pagara un tributo de tres
mil cuatrocientos kilos de plata, y treinta y cuatro kilos
de oro.
Joacim gobierna en Judá
34Luego
el faraón Necao puso en el trono a Eliaquim, otro de los
hijos de Josías, para que reinara en lugar de su padre y le
cambió el nombre a Joacim. Joacaz fue llevado a Egipto como
prisionero, y allí murió.
35Para
obtener la plata y el oro que el faraón Necao exigía como
tributo, Joacim recaudaba un impuesto de los habitantes de
Judá, para el cual les pedía que pagaran en proporción a sus
riquezas.
36Joacim
tenía veinticinco años cuando subió al trono y reinó en
Jerusalén once años. Su madre se llamaba Zebuda y era hija
de Pedaías, de Ruma. 37Él
hizo lo malo a los ojos del Señor,
igual que sus antepasados.
2 Reyes 24
1Durante
el reinado de Joacim, Nabucodonosor, rey de Babilonia,
invadió la tierra de Judá. Joacim se rindió y le pagó
tributo durante tres años, pero después se rebeló.2Entonces
el Señor mandó
contra Judá bandas de saqueadores babilonios, arameos,
moabitas y amonitas a fin de destruirla, tal como el Señorlo
había prometido por medio de sus profetas.3Estas
calamidades le sucedieron a Judá por orden del Señor.
Él había decidido expulsar a Judá de su presencia debido a
los muchos pecados de Manasés, 4quien
había llenado Jerusalén con sangre inocente. El Señor no
perdonaba eso.
5Los
demás acontecimientos del reinado de Joacim y todos sus
logros están registrados en El
libro de la historia de los reyes de Judá. 6Cuando
Joacim murió, su hijo Joaquín lo sucedió en el trono.
7A
partir de entonces, el rey de Egipto no se atrevió a salir
más de su país, porque el rey de Babilonia conquistó toda la
región que anteriormente pertenecía a Egipto, desde el
arroyo de Egipto hasta el río Éufrates.
Joaquín gobierna en Judá
8Joaquín
tenía dieciocho años cuando subió al trono y reinó en
Jerusalén tres meses. Su madre se llamaba Nehusta y era hija
de Elnatán, de Jerusalén. 9Joaquín
hizo lo malo a los ojos del Señor,
igual que su padre.
10Durante
el reinado de Joaquín, los oficiales del rey Nabucodonosor
de Babilonia subieron contra Jerusalén y la sitiaron. 11El
propio Nabucodonosor llegó a la ciudad durante el sitio. 12Entonces
el rey Joaquín, junto con la reina madre, sus consejeros,
sus comandantes y sus oficiales, se rindieron ante los
babilonios.
Durante el octavo año de su reinado, Nabucodonosor tomó a
Joaquín prisionero.13Como
el Señor ya
había dicho, Nabucodonosor se llevó todos los tesoros del
templo del Señor y
del palacio real. Sacó todos
los objetos de oro que el rey Salomón había puesto en el
templo. 14El
rey Nabucodonosor se llevó cautiva a toda la población de
Jerusalén —unas diez mil personas en total— incluso a los
comandantes y a los mejores soldados, y a los artesanos y a
otras personas habilidosas. Solo dejaron en el país a la
gente más pobre.
15Nabucodonosor
llevó cautivo a Babilonia al rey Joaquín, junto con la reina
madre, las esposas del rey, sus funcionarios y las personas
más influyentes de la sociedad de Jerusalén. 16También
desterró a siete mil de los mejores soldados, y a mil
artesanos y a otras personas habilidosas, todos fuertes y
aptos para la guerra. 17Después
el rey de Babilonia puso en el trono a Matanías, tío de
Joaquín, para
que fuera el siguiente rey y le cambió el nombre a Sedequías.
Sedequías gobierna en Judá
18Sedequías
tenía veintiún años cuando subió al trono y reinó en
Jerusalén once años. Su madre se llamaba Hamutal y era hija
de Jeremías, de Libna. 19Sedequías
hizo lo malo a los ojos del Señor,
igual que Joacim. 20Estas
cosas sucedieron debido al enojo que el Señortenía
contra la gente de Jerusalén y de Judá, hasta que finalmente
los expulsó de su presencia y los envió al destierro.
Caída de Jerusalén
Sedequías se rebeló contra el rey de Babilonia.
2 Reyes 25
1Así
que el 15 de enero, durante
el noveno año del reinado de Sedequías, Nabucodonosor, rey
de Babilonia, dirigió a todo su ejército contra Jerusalén.
Rodearon la ciudad y construyeron rampas de asalto contra
las murallas.2Jerusalén
estuvo sitiada hasta el año once del reinado de Sedequías.
3Hacia
el 18 de julio del año once del reinado de Sedequías, el
hambre en la ciudad ya era muy intensa y se había agotado
por completo lo último que quedaba de alimento. 4Entonces
abrieron una brecha en la muralla de la ciudad, y todos los
soldados huyeron. Como la ciudad estaba rodeada por los
babilonios, esperaron
hasta la caída de sol y entonces se deslizaron por la puerta
que está entre las dos murallas, detrás del jardín real, y
se dirigieron al valle del Jordán.
5Sin
embargo, las tropas babilónicas persiguieron
al rey y lo capturaron en las llanuras de Jericó, porque
todos sus hombres lo habían abandonado y se habían
dispersado. 6Lo
llevaron ante el rey de Babilonia, que se encontraba en
Ribla, donde dictó sentencia contra Sedequías. 7Hicieron
que Sedequías presenciara la masacre de sus hijos. Luego le
sacaron los ojos, lo ataron con cadenas de bronce y lo
llevaron a Babilonia.
Destrucción del templo
8El
14 de agosto de ese año, que
era el año diecinueve del reinado de Nabucodonosor, llegó a
Jerusalén Nabuzaradán, capitán de la guardia y funcionario
del rey babilónico.9Quemó
por completo el templo del Señor,
el palacio real y todas las casas de Jerusalén. Destruyó
todos los edificios importantes de
la ciudad. 10Después
supervisó a todo el ejército babilónico mientras derribaba
por completo las murallas de Jerusalén. 11Nabuzaradán,
capitán de la guardia, se llevó cautivas a las personas que
quedaban en la ciudad, a los desertores que habían jurado
lealtad al rey de Babilonia, y al resto de la población; 12pero
el capitán de la guardia permitió que algunos de los más
pobres quedaran en Judá para cuidar los viñedos y los
campos.
13Los
babilonios hicieron pedazos las columnas de bronce que
estaban al frente del templo del Señor,
las carretas de bronce para llevar agua y el enorme tazón de
bronce llamado el Mar, y se llevaron todo el bronce a
Babilonia.14También
se llevaron los recipientes para la ceniza, las palas, las
despabiladeras de las lámparas, los platos y todos los demás
objetos de bronce que se usaban para realizar los
sacrificios en el templo. 15Nabuzaradán,
capitán de la guardia, también se llevó los recipientes para
quemar el incienso y los tazones, y todos los demás objetos
de oro puro o de plata.
16El
peso del bronce de las dos columnas, el Mar y las carretas
para llevar agua era tanto que no podía calcularse. Estos
objetos se habían hecho para el templo del Señor en
tiempos del rey Salomón. 17Cada
columna tenía unos ocho metros de
altura. El capitel de bronce en la parte superior de cada
columna era de casi dos metros y medio de
altura y estaba decorado alrededor con una red de granadas
hecha de bronce.
18Nabuzaradán,
capitán de la guardia, se llevó consigo como prisioneros al
sumo sacerdote Seraías, al sacerdote de segundo rango
Sofonías, y a los tres porteros principales. 19De
la gente que seguía escondida en la ciudad, se llevó a un
oficial que había estado al mando del ejército judío, a
cinco de los consejeros personales del rey, al secretario
principal del comandante del ejército, quien estaba a cargo
del reclutamiento, y a otros sesenta ciudadanos. 20Nabuzaradán,
capitán de la guardia, los llevó a todos ante el rey de
Babilonia, que se encontraba en Ribla. 21Allí,
en Ribla, en la tierra de Hamat, el rey de Babilonia mandó
que los ejecutaran a todos. Así que el pueblo de Judá fue
expulsado de su tierra y llevado al destierro.
Gedalías gobierna en Judá
22Luego
el rey Nabucodonosor nombró gobernador sobre la gente que
había dejado en Judá a Gedalías, hijo de Ahicam y nieto de
Safán. 23Cuando
todos los comandantes del ejército y sus hombres se
enteraron de que el rey de Babilonia había nombrado
gobernador a Gedalías, fueron a verlo a Mizpa. En ese grupo
estaban Ismael, hijo de Netanías; Johanán, hijo de Carea;
Seraías, hijo de Tanhumet el netofatita y Jezanías, hijo
del maacateo, junto con todos sus hombres.
24Gedalías
les juró que los funcionarios babilónicos no querían
hacerles ningún daño. «No les tengan miedo. Vivan en la
tierra y sirvan al rey de Babilonia, y todo les irá bien»,
les prometió.
25Después,
a mediados del otoño de ese año, Ismael,
hijo de Netanías y nieto de Elisama, quien era de la familia
real, fue con diez hombres a Mizpa y mató a Gedalías.
También mató a todos los judíos y babilonios que estaban con
Gedalías en Mizpa.
26Entonces
toda la gente de Judá, desde el menos importante hasta el
más importante, junto con los comandantes del ejército,
huyeron despavoridos a Egipto, porque tenían miedo de lo que
pudieran hacerles los babilonios.
Esperanza para la descendencia real de Israel
27En
el año treinta y siete del exilio de Joaquín, rey de Judá,
Evil-merodac ascendió al trono de Babilonia. El nuevo rey
fue bondadoso con Joaquín
y lo puso en libertad el 2 de abril de ese año. 28Le
habló con amabilidad y le dio una posición superior a la de
los demás reyes exiliados en Babilonia. 29Le
proporcionó a Joaquín ropa nueva para reemplazar la ropa de
prisionero y le permitió comer en presencia del rey por el
resto de su vida. 30Así
que el rey de Babilonia le dio una ración diaria de comida
mientras vivió.