|
Las pruebas y problemas tienden a hacernos temerosos. En lugar de
sentirnos fuertes y audaces, ¡nos sentimos estancados y fríos! Sin
embargo, Sofonías 3:17 nos recuerda: "Pues el Señor tu Dios vive en
medio de ti. Él es un poderoso salvador. Se deleitará en ti con
alegría. Con su amor calmará todos tus temores.
Se gozará por ti con cantos de alegría." Este es el primer secreto
para restaurarnos: ¡Dios está conmigo! Tenerlo a mi lado es como
tener al ejército para pelear batalla ¡con un grupo de niños!
Luego, Él se regocijará sobre nosotros con alegría. Toda su atención
y afecto amoroso se dirige hacia nosotros en la misma forma en que
un padre dirige su atención hacia su hijo.
Entonces, él calmará todos nuestros miedos. Nuestro lloriqueo tímido
no tiene lugar, porque "el perfecto amor echa fuera el temor" (1ª
Juan 4:18). Podemos estar contentos y seguros en sus brazos.
Finalmente, él se regocija sobre nosotros cantando una canción
alegre. Esta imagen es como la de un padre con un niño cantándole en
su hora más oscura. ¿Te imaginas a Dios cantando cánticos de
liberación sobre vos? ¿Qué enemigo tiene alguna oportunidad contra
eso?
¡Sé valiente y fuerte! Nuestro Padre está en la escena. ¡Dios está
en control!
352 días pasaron. ¡Quedan solo 13!
|