El Cántico de Moisés tenía la intención de recordar a los israelitas que si volvían atrás, estarían descuidando la Roca que los engendró y el Dios que los había dado a luz (Deuteronomio 32:18). Esa Roca, que es Cristo (1 Corintios 10:4), los había seguido en el desierto y proporcionado bebida para ellos durante cuarenta años. ¿Cómo podían haber dado la espalda a su Roca? Tal vez los israelitas tomaron a Dios por sentado, pensando que podían prever y defenderse sin su ayuda.

Nuestras vidas están confundidas e inseguras cuando dejamos nuestra Roca con el fin de construir nuestra vida sobre arena movediza (Mateo 7:26-27). El rico insensato pensó que estaba seguro en sus graneros y posesiones, pero se dio cuenta que su vida estaba construida sobre una base falsa (Lucas 12:16-21). Podemos mirar alto y bajo, tratando de encontrar la seguridad en dinero, posiciones, organizaciones, e incluso naciones. Por desgracia, nos daremos cuenta de que todas esas cosas se desmoronan con el tiempo y convierten en polvo.

Aunque el mundo pone su confianza en cosas y personas que decepcionan, decidí hoy buscar la roca inamovible del Reino de Dios. "Busquen el reino de Dios por encima de todo lo demás, y él les dará todo lo que necesiten." (Lucas 12:31).

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